Establecimientos turísticos
Iglesia de Santa María A Real
Se trata de un templo con planta de cruz latina, con tres naves separadas por pilastras y un crucero muy elevado que, en su intersección con la nave central, se cubre con una cúpula rematada al exterior con un tambor octogonal coronado con linterna. El coro se sitúa en la entrada principal, encima de las primeras pilastras. La bóveda es de crucería y en las naves laterales se abren dos capillas semicirculares coincidiendo con el crucero.
La fachada principal es la occidental, concebida como un retablo en piedra, se divide en tres cuerpos con diferentes motivos en cada uno de ellos. Destacan las columnas salomónicas que
dan movimiento de ascensión y verticalidad al conjunto, al tiempo que dirigen la vista del observador hacia los conjuntos escultóricos que destacan en la calle central desarrollando el tema de la Asunción de la Virgen. En el nicho del segundo piso se ve a María en actitud orante, elevada hacia los cielos por un trono de ángeles, en el tercer piso se aprecia un panel en relieve con la Santísima Trinidad en actitud de coronar a la Madre de Jesús. Los tres cuerpos se matan en un ático con frontón partido en cuyo centro destaca una figura, acompañada por otras dos, a modo de acróteras, en los vértices. La unión con las naves laterales se realiza a través de volutas coronadas con bolas asentadas sobre pedestales.
La torre-campanario, de planta cuadrada, es también barroca, pero su estilo es diferente al de la fachada, lo que nos indicaría un anexo ligeramente posterior o de un arquitecto diferente. El
primer cuerpo se remata con una balaustrada, en el segundo cuerpo se asientan las campanas enmarcadas por arcos de medio punto peraltadas. La torre termina con un copulín sobre tambor ciego con volutas de transición.
Según el estudio realizado por Leopoldo Fernández Gasalla cabe distinguir dos etapas constructivas fundamentales. En la primera (1708-1739) se realizarían la fachada principal (oeste) la fachada sur, junto con el campanario. La segunda etapa se correspondería con la construcción de la cabecera de la iglesia, incluyendo el crucero, la cúpula y la fachada del Evangelio, en torno al 1772.
